domingo, 26 de octubre de 2025

CONSIDERARSE JUSTO Y DESPRECIAR A LOS DEMÁS

El pasaje del fariseo y el publicano de este domingo se ha leído con frecuencia como la enseñanza de Jesús sobre dos maneras distintas de orar: la oración soberbia del fariseo y la oración humilde el publicano. El evangelio sostiene que hay dos maneras de orar: como los paganos que hablan mucho y como los seguidores de Jesús que confían mucho. Este es el pensamiento del evangelio sobre la oración.

Pero el texto de hoy va más lejos. Describe dos maneras de ser: una considerarse justo y despreciar a los demás. Otra: reconocer las propias limitaciones sin despreciar a nadie. Huelga decir que es esta segunda la que apoya el evangelio.

Hemos de superar la cultura del menosprecio. Hemos de superar el sarcasmo, el insulto, el supremacismo, esa infantil actitud que cree que lo mío es lo único valioso y lo de los demás no merece consideración. Esa cultura llevará a algunos países (como EEUU) a una situación sin salida. Tomemos nosotros la parte que nos toca.

Frente a la cultura del menosprecio habríamos de construir la cultura de la comprensión y de la compasión. Es la manera de ser de quien mira al corazón de la realidad y de las personas para ver ahí reflejadas las mismas situaciones por las que uno pasa y que le hacen ser apoyo, ayuda y ánimo para quien anda en dificultad. Esto será altamente beneficioso para la fe y para la sociedad.

Fidel Aizpurúa, capuchino

domingo, 19 de octubre de 2025

¿ENCONTRARÁ ESTA FE EN LA TIERRA?

El evangelio de este domingo está orientado por el mismo evangelista a la oración “insistente”. Pero el texto dice que el secreto de la oración cristiana no reside en orar mucho, sino en hacerlo con mucha confianza (Mt 6,7). Por eso, más que de orar insistentemente se trataría de orar confiadamente.

Pero el pasaje de la viuda importuna tiene debajo otra cosa: la sed de justicia. Más que una orante, la viuda cree que hasta los jueces venales y descreídos tienen que hacer justicia porque si desaparece la justicia de la tierra desaparece la dignidad. El mismo Jesús no se cansaba de decir: “Buscad primero el reino de Dios y su justicia” (Mt 6,33).

El texto evangélico termina con una pregunta extraña: “Cuando venga el hijo del Hombre ¿encontrara esta fe en la tierra? ¿A qué fe se refiere? A la fe en la justicia. Es más decisiva la fe en la justicia que la fe en Dios porque sin justicia hasta la fe en Dios pierde sentido. Si nos interpela el tema de la justicia, si oramos por ella, si nos comprometemos un poco nuestra fe está viva. De lo contrario, está en peligro.

Fidel Aizpurúa, capuchino

martes, 14 de octubre de 2025

ORACIÓN COMUNITARIA, OCTUBRE 2025

 Haz clic en la imagen para acceder a la oración comunitaria para este mes.

domingo, 12 de octubre de 2025

UNA MUJER DESDE EL GENTÍO

Dice el evangelio de hoy que la alabanza a la madre y a la creyente que es María sale de una mujer desde el gentío. Es una mujer la que ha captado la grandeza de María que es ser madre de Jesús y que ha provocado la aseveración de Jesús de que es más importante ser creyente que ser madre. Una mujer de entre el gentío nos ha llevado del aprecio a María a la fe del creyente.

Es evidente el importante papel que las mujeres juegan en la vida eclesial y el problema que no terminamos de solucionar, el lugar de las mujeres en la Iglesia. Por eso, hay que seguir en el camino marcado por el recordado Papa Francisco que decía que “la Iglesia es mujer”.

Cada vez se escuchan más voces que demandan en la Iglesia igualdad entre hombre y mujeres. Son voces desde el gentío que hacen visible la presencia de las mujeres en la Iglesia y marcan el futuro a seguir.

Celebramos una fiesta de María muy arraigada en nuestro país. Celebrar es comprometerse a que la igualdad sea la pauta general de la comunidad cristiana. Y por eso hay que superar el continuado pecado de injusticia y de desigualdad que aún sufren las mujeres cristianas. No será imposible si nos damos a la tarea.

Fidel Aizpurúa, capuchino