Hemos de contribuir, cada uno en nuestro ambiente, a entender y vivir la fe con libertad. Ya pasaron, gracias a Dios, los tiempos de la coacción religiosa. Por eso, aunque seamos menos, si practicamos la fe con libertad y respetamos la libertad de quien no la practica, hemos avanzado. Quizá sea uno de los más claros signos de los tiempos de nuestra época.
sábado, 28 de septiembre de 2024
VIVIR LA FE CON LIBERTAD
Hemos de contribuir, cada uno en nuestro ambiente, a entender y vivir la fe con libertad. Ya pasaron, gracias a Dios, los tiempos de la coacción religiosa. Por eso, aunque seamos menos, si practicamos la fe con libertad y respetamos la libertad de quien no la practica, hemos avanzado. Quizá sea uno de los más claros signos de los tiempos de nuestra época.
jueves, 26 de septiembre de 2024
CAMPAÑA CURSO 2024-2025: CANTANDO LA VIDA
El Cántico es la expresión y el resumen de la vida del Poverello que quiso parecerse en todo a Cristo. Su fe en Dios Padre se convierte en un canto de alabanza que proclama la fraternidad de todas las criaturas y su belleza.
Celebrar el centenario del Cántico de las criaturas nos lleva a un cambio radical en nuestra relación con la creación, que consiste en sustituir la posesión por el cuidado de nuestra casa común, viviendo cada uno su relación con las demás criaturas como un hermano, que se detiene ante la creación, admira su belleza y cuida la vida.
La crisis ecológica actual nos revela que el entorno humano y el natural se conservan y embellecen juntos, de la misma manera. Cuidar la casa común y descuidar la casa interior, nuestro corazón, no es el camino correcto: necesitamos una conversión ecológica e integral al mismo tiempo.
En este octavo centenario se nos invita a todos a proponer nuevamente a la sociedad contemporánea «el lenguaje de la fraternidad y de la belleza en nuestra relación con el mundo» (Laudato si’ 11). En la sección de Campañas de este blog encontrareis el material que hemos preparado para el curso; esperamos que lo disfrutéis y lo utilicéis con la misma ilusión con la que lo hemos preparado. Que vivamos “Cantando la Vida”.
martes, 24 de septiembre de 2024
RATIO FORMATIONIS: EL CÁNTICO
sábado, 21 de septiembre de 2024
SERVIDORES
El evangelio pretende cambiar nuestro chip interior: hacer de uno que quiere ser servido, un servidor. No nos parezca imposible porque, si fuera así, ¿para qué se nos ha dado el evangelio? Podemos lograr, en parte, una nueva manera de ser. Es cuestión de confianza en Dios y de trabajo fiel por nuestra parte.
jueves, 19 de septiembre de 2024
CAMPO DE TRABAJO, VERANO 2024
Hola, soy Lucía Mayoral y participé en el voluntariado de Madrid de 2024. Cuando me explicaron el propósito del viaje a Madrid me encanto la idea, pero fue cuando lo viví que no dude ni un momento en saber que había hecho muy bien en ir.
Nosotros, los voluntarios, trabajamos en dos lugares muy conectados entre sí, pero distintos. El primer lugar de actuación fue Casa Boza, donde se imparte un servicio de residencia y acompañamiento para inmigrantes subsaharianos en nuestro convento de Usera, aproximadamente hay 12 personas viviendo allá. Y, el segundo, fue el Proyecto Afrique que consta de un centro de día para la acogida, encuentro, orientación e intervención con inmigrantes de origen subsahariano recién llegados a Madrid. Estos proyectos son dos de los cuatro que tiene el Servicio Capuchino para el Desarrollo y la Solidaridad (SERCADE) en Madrid.
Tras esta breve explicación, paso a contaros lo que hacíamos en los días del voluntariado. Por las mañanas íbamos a Casa Boza, donde se plantearon dos actividades; la primera consistía en transformar unos palets en maceteros, y la segunda era realizar un mural en la puerta de la entrada. Los voluntarios y los chicos que viven allá nos dividimos y nos mezclamos en dos grupos. Cada grupo hizo una de las actividades a lo largo de los días que estuvimos allá. De la misma manera, que al trabajar juntos se entablábamos conversaciones muy interesantes con ellos, también era un buen rato la comida, ya que comíamos con ellos en la casa.
Por la tarde íbamos al Proyecto Afrique, que está abierto de 16:00 a 20:00. Los inmigrantes reciben clases de español de 17:00 a 19:00 impartidas por profesores voluntarios. Nosotros nos repartimos y estuvimos dando clases de español también. Y, cuando acababan, cogíamos un parchís, y jugábamos con ellos.
En cambio, no fue toda la semana igual. Un día fuimos a comer y pasar la tarde al río con todos, tanto los chicos de Boza como los de Afrique. Otro día fuimos a una piscina con los chicos de Boza, y como era el último día que íbamos a estar con ellos, por la tarde fuimos al Retiro, con Boza y Afrique. Al Retiro llevamos las guitarras y algún que otro balón, estuvimos jugando, bailando, jugando a las cartas... En resumen, un intercambio precioso de culturas.
Y, me gustaría para finalizar, agradecer a Aimara y Clara, las trabajadoras sociales de Casa Boza, y a María Seco, coordinadora del Proyecto Afrique, por poner tanto amor al trabajo que hacen y acogernos tan bien como lo han hecho. También a Jesús por hacernos sentir como en casa en El Pardo. Asimismo, agradecer a Javi y Luis por organizar una experiencia tan impresionante como esta. Y como no dar las gracias al grupo de voluntarios: Eva, María, Alex, Sergio, Marta, Mikel y Alba, no habría sido una de mis mejores experiencias sin vosotros. Y, por último, dar las gracias a todos los inmigrantes subsaharianos que están en los proyectos, por ser tan agradecidos y buenas personas como lo sois todos, y, sobre todo, por hacerme abrir los ojos contándome vuestras experiencias, confiando en mi cuando era una mera desconocida para vosotros. Gracias.
martes, 17 de septiembre de 2024
sábado, 14 de septiembre de 2024
PARECÍA QUE NO, PERO FUE QUE SÍ
Cuando estuvimos el fin de semana en familias en Urbasa surgió el tema de la participación en la Semana Bíblica: "no se si va a salir"... "hay poca gente apuntada"... "a estas alturas"... Nosotros habíamos llevado una temporada bastante complicada y no nos habíamos planteado ni las vacaciones, así que al regresar, entre curvas y hayas, esa llamada a participar en la Semana Bíblica surgió y fue como una necesidad... ¡bendita necesidad!
Antes de llegar a Zudaire ya habíamos dado el sí quiero y en la autopista reclutamos otra participante que también dio el sí.
No sólo nosotros, por supuesto, si no que ha sido un grupo de lo más diverso, en edad, y geográficamente hablando, pero hemos tenido un mismo corazón; desde los niños, los cuidadores, cocina, responsable… hasta la maravilla de ponentes que desde su saber nos han presentado y enseñado a abrir la Biblia y leerla y querer seguir leyendo y saber más y más, despertar en nosotros una sed de saber y hacer reino y comunidad en cada uno de nuestros lugares.
Nos hemos reído mucho, hemos aprendido mucho, hemos paseado mucho, nos hemos cuidado mucho unos a otros, nos hemos querido mucho, emocionado… eso es comunidad, familia, eso hacía Jesús ¿no? Seguro que si.
Gracias a todos, pero sobre todo a Dios por darnos la oportunidad de conocerle y quererle más y más. Ojalá volver al paraíso.
viernes, 13 de septiembre de 2024
VERANO EN URBASA 2024
A lo largo de una fantástica semana, que parece un mes pero que pasa tan rápido como media hora, acampados y animadores, empapándonos de la magia de la puerta roja, nos zambullimos en el paradisíaco entorno natural de Urbasa. Allí, es fácil entender por qué san Francisco de Asís estaba tan maravillado con la entera Creación que tanto ama, ama y ama.
Un sol radiante y amable nos maravilló en el atardecer de película que vivimos en Santa Marina, tras un intenso día de travesía.
La luna y las estrellas iluminaban nuestras noches regalándonos un espectacular cielo limpio y radiante que admirábamos desde el pinar al lado de casa en los paseos nocturnos.
El agua nos recibía dándonos los buenos días en forma de neblina por las mañanas, nos refrescaba en la piscina antes de comer y nos recordaba su pureza en el nacedero del Urederra.
El hermano fuego nos calentó y dio luz en la fría y oscura noche de la travesía en el refugio de Santa Marina, guardándolo cálido, cuidando nuestro sueño.
La madre tierra llenaba del verde frondoso de árboles y forraje nuestros ojos día a día, en nuestras divertidas y alegres caminatas, nutriendo a la preciosa sierra de Urbasa y dando hogar a la extensa fauna y flora con la que compartimos este paraje.
La fuente de los mosquitos que limpiamos y los cardos que podamos en la actividad de voluntariado, nos enseñaron a devolver a la naturaleza todo lo que nos da, entregando nuestro trabajo para que el agua fluya limpia de nuevo y el campo florezca sin ataduras.
Y tras esto, como san Francisco, todos los días teníamos nuestro momentos de oración ante el Cristo de san Damián en la capilla, de hablar y reflexionar con Dios, de pedir perdón y perdonar y de dar gracias entre lágrimas, sonrisas y abrazos, por todo lo que Él nos da, por la semana tan especial que nos regala y por acompañarnos a través de nuestra querida magia de la puerta roja, que, sin duda alguna, ama, ama, ama y ensancha el alma.