jueves, 29 de diciembre de 2016

UNA NOCHEBUENA DIFERENTE

La Nochebuena del 2016 ha sido diferente. Mi madre acaba de salir de una cirugía por una rotura de cadera y he pasado esta noche con ella en su casa. Ya me había dicho lo que quería para cenar: sopa de pescado, cordero asado y tarta de manzana: ¡la mujer, a pesar de estar convaleciente ha apostado fuerte!

Pero ella comenzó a vomitar durante la tarde del día 24 y su esperada cena de Nochebuena se redujo a media taza de leche con galletas, sin que se pudiera levantar de la cama. Mi cena tuvo el menú que mi progenitora había escogido, pero la situación era atípica: en Nochebuena sentado sólo, en la desarbolada mesa de la cocina, y con mi madre durmiendo en la habitación. Expresamente no me puse a ver la televisión porque no quería que este aparato marcara lo que estaba viviendo. Las circunstancias hacían que esa noche tuviera una gran densidad de significado, era como si el aire de la casa tuviera más contenido: Jesús naciendo frágil, en medio del silencio y la oscuridad, en un pueblo de Judea perdido del mundo; y mi madre, envuelta en una gran vulnerabilidad, rodeada de un aparente vacío de compañía, de fiesta, de alegría y en el anonimato de un quinto piso. Este paralelismo llenaba de sentido aquel momento.

Entre los mensajes de WhatsApp que recibí, me llamó la atención el de una amiga que, como le faltaban algunas personas esa noche, había organizado una cena con quince comensales. Y me escribía que se sentía sola. Yo no podía decir que me experimentara acompañado, pero en mi solitaria cena en la mesa blanca de la cocina, no me encontraba solo: había una densidad, una intensidad en aquella noche que es difícil de explicar. Era como cuando el cruce de una mirada con otra persona llena de contenido el instante: dirías que no está pasando nada, pero ocurren muchas cosas en ese simple encuentro de pupilas. Había una gran paradoja: en una cena multitudinaria una persona sufre la soledad, y un hombre cenando sin compañía no se siente solo.

Al recibir ese mensaje me vino a la cabeza que, a veces, cuando huimos del vacío no hacemos otra cosa que adentrarnos más en él. Quizá sea porque no hemos diagnosticado acertadamente que la sed que sentimos no es de diversión, compañía, entretenimiento o placer como pudiera parecer. Quizá, como dice el salmo, la sed que tengamos sea de lo Esencial, de lo hondo de la Vida, de Dios: "mi alma está sedienta de ti; mi carne tiene ansia de ti, como tierra reseca, agostada, sin agua" (Salmo 62,2).

Javi Morala, capuchino

martes, 27 de diciembre de 2016

DESCANSAR EL TRABAJO

El trabajo es un ámbito de mucha ambigüedad para nosotros. Por un lado, es costoso y se hace realidad el dicho bíblico de ganarse el pan con el sudor. También es un ámbito donde afloran nuestros fondos más oscuros e incontrolables de luchas, de competencias, de intereses ocultos, de rivalidades, de poder. Un ámbito de tensión. Pero es también ámbito de realización personal, de asunción de responsabilidades, de maduración, de creatividad, de paciencia, de hacer bien las cosas.

Es un ámbito donde, día a día, nos jugamos mucho de lo que somos. Un ámbito donde podemos dar lo mejor de nosotros, y donde también puede aflorar lo peor. Un ámbito que nos puede ayudar a crecer y madurar, y un ámbito donde las tensiones pueden llevarnos a la agresividad o a la desgana y la desafección por lo que hacemos.

¿Cómo vivir el mundo del trabajo sin rompernos en las tensiones, y sin volvernos funcionarios grises a quienes nada afecta? ¿Cómo poder encontrar todas las mañanas razones para vivir nuestro trabajo con motivación? El secreto está en saber descansar el trabajo. Saber darle al trabajo su propia dimensión, sin absolutizarlo. Tener otros ámbitos distintos del mundo del trabajo. Pero tan importante como eso es poder contar con personas con quienes poder compartir las tensiones y los logros de la jornada. Sino, vamos cargando nuestra mochila de tensiones que a la larga nos pasan factura.

Y, por supuesto, podemos descansar la tarea en Dios. Ya nos lo dijo Jesús: “a cada día le basta su afán”. Y es que muchas veces las tensiones nos surgen de querer controlar el mañana, de la inseguridad del futuro. Qué importante es confiar en que Dios se hace cargo de nuestras tensiones, de nuestras inseguridades, de nuestras preocupaciones, y poder dejar todo ello en sus manos. No para despreocuparnos, sino para vivirlo todo desde la confianza.
Carta de Asís, diciembre 2016 

domingo, 25 de diciembre de 2016

¡FELIZ NAVIDAD!

Gloria a Dios en el cielo y en la tierra... Buena Noticia.
Tú qué estás cansado de recibir malas noticias...,
ven a Belén e infórmate de una vez por todas de Aquel
que ha nacido para convertirse en tu Buena Nueva.

Gloria a Dios en el cielo y en la tierra... amor.
Tú que recibes constantes calabazas buscando a tu media naranja...,
ven a Belén a adorar a Aquel que ha nacido para amarte eternamente.

Gloria a Dios en el cielo y en la tierra... esperanza.
Tú que sueñas en estos días con el Gordo de la Navidad...
Ven a Belén a recibir a Aquel que ha nacido para ser el Premio de los premios.

Gloria a Dios en el cielo y en la tierra... alegría.
Tú que acudes a los convites navideños con cara de “pimiento avinagrado”...,
ven a Belén y llénate del júbilo de Aquel que ha nacido para ser la fuente de tu felicidad.

Gloria a Dios en el cielo y en la tierra... humanidad.
Tú que piensas que Dios es un ser que vive a miles de kilómetros de ti...,
ven a Belén a encontrarte con Aquel que ha nacido para ser uno más de los tuyos.

Gloria a Dios en el cielo y en la tierra... regalo.
Tú que te agobias todas las navidades envolviendo cientos de regalos...,
ven a Belén a “desenvolver” a Aquel que está deseando hacerse don y regalo para ti.

Gloria a Dios en el cielo y en la tierra... fiesta.
Tú que reduces las navidades a un simple cotillón...,
ven a Belén a “descorchar el corazón” de Aquel
que ha nacido para celebrar, contigo y por ti, el Milagro de la Vida.

María Germania Troya

sábado, 24 de diciembre de 2016

BENDICIÓN DE LA MESA DE NOCHEBUENA

Bendice, Señor, nuestra mesa de Nochebuena.
Por una noche, al menos,
deseamos que el mundo sea una gran familia,
sin guerras, sin miseria, sin drogas y sin hambre.
Sin refugiados de ningún color.
Con algo más de música y alegría
y mucha más justicia y solidaridad.
Que nuestra casa, Jesús recién nacido,
acoja tu palabra de amor y de perdón,
de misericordia y benignidad.
¡Que sea la casa de todos!
De todas las mujeres.
De todos los hombres.
De todos los niños.
Sí, ¡de todos los niños!.
Consérvanos unidos.
Danos pan y trabajo durante todo el año.
Danos fuerza y ternura,
para ser personas abiertas y justas,
que luchen, sin cansancios ni desaliento
por un mundo donde haya buenos días
y muchas noches-buenas, como ésta
en que quisiste poner tu tienda entre nosotros.
Tú serás bienvenido, Señor,
siempre a esta casa,
hasta que nos reúnas en la tuya,
al final,
a todos los hombres y mujeres del mundo,
en la alegría inagotable de tu cielo
en el gozo crecido de tu reino sin fin.
Así sea.

jueves, 22 de diciembre de 2016

TENDER PUENTES EN NAVIDAD

Del mismo modo que, a veces, en nuestros nacimientos, hay un puente que une dos laderas de arena sobrevolando un río de plata, en este otro Nacimiento navideño hay un puente mucho más hondo, que salva abismos.

Entre la vida y la Vida (la plena, la definitiva). Entre la soledad y el encuentro. Entre la pequeñez y la gloria. Entre la navidad y la pascua. Entre el miedo y la valentía de quienes se atreven a creer. Entre la oscuridad y la luz verdadera. Y cuando entramos a caminar por las tierras de ese misterio, entonces empezamos el viaje más importante de nuestra vida.

¿Por qué no adentrarnos ahora por esa tierra? ¿Hay algún puente que tengas que recorrer en esta etapa de tu vida?

NAVIDAD [Fragmentos]
Es difícil detectar El Anuncio
entre tantos anuncios que nos invaden.
¿Existe aún la Navidad?
¿Navidad es Buena Nueva?
¿Navidad es también Pascua?
Sabemos que «no hay lugar para ellos».
Sabemos que hay lugar para todos,
hasta para Dios.
(…)
Todo puede ser mentira,
menos la verdad de que Dios es Amor
y de que toda la Humanidad
es una sola familia.
Dios continúa entrando por abajo,
pequeño, pobre, impotente,
pero trayéndonos su Paz.
Doña María y el señor José
continúan en la comunidad.
La sangre de los mártires
continúa fecundando la primavera alternativa.
Los cayados de los pastores,
(y del Parkinson también),
las banderas militantes,
las manos solidarias
y los cantos de la juventud
continúan alentando la Caminada.
Las estrellas sólo se ven de noche.
Y de noche surge el Resucitado.
«No tengan miedo».
En coherencia, con tesón y en la Esperanza,
seamos cada día Navidad,
cada día seamos Pascua.
Amén, Axé, Awire, Aleluia.

Pedro Casaldáliga

martes, 20 de diciembre de 2016

NECESITADOS DE DIOS

Muchas veces en nuestra vida utilizamos el verbo necesitar. Sobre todo lo utilizamos en primera persona por una razón muy simple: porque las propias necesidades son las que más nos afectan e inquietan. Cada vez alargamos más la lista de necesidades. El mundo en el que vivimos nos va creando nuevas que antes no teníamos. Un móvil mejor, un coche más moderno, un ordenador más nuevo porque hay programas o actualizaciones nuevas, unas vacaciones…

Algunas necesidades son buenas y nos facilitan la vida. En cambio otras, creadas tan artificialmente, no nos hacen ningún bien, aunque pensemos que son cosas imprescindibles para vivir. Hay veces que creemos que la felicidad consiste en llegar a satisfacer todas nuestras necesidades. Es tal la obsesión por ser felices que deseamos obtener la felicidad, a veces de forma compulsiva, como si estuviera fuera de nosotros, como si se lograra como un producto que compras en la tienda.

El mes de diciembre y la dinámica en la que nos introduce la sociedad los días antes de la Navidad nos hace ser conscientes de las necesidades que nos creamos y que nos crea la misma sociedad. Podemos vivir estos días navideños, familiares, de forma más sencilla, sin tanto agobio, sin tanto exceso, dando sentido a lo que realmente es importante. Siendo conscientes de la presencia de Dios entre nosotros y de que somos personas necesitadas de Dios.

La Navidad encierra un secreto que, desgraciadamente, escapa a todas esas personas que en esas fechas celebran «algo» sin saber exactamente qué. No pueden sospechar que la Navidad ofrece la clave para descifrar el misterio último de nuestra existencia. El ser humano a menudo ha gritado o planteado a Dios, angustiado, sus porqués más profundos e importantes. Y no siempre ha escuchado la respuesta de Dios. En Navidad Dios nos habla. “La Palabra se hace carne”. Quiere sufrir en nuestra carne nuestros interrogantes. Está con nosotros, en nosotros y entre nosotros. Ya no estamos solos, como dice Leonardo Boff, “ya no somos solitarios, sino solidarios”. Dios comparte nuestra vida y con él, podemos caminar hacia la salvación. Por eso la Navidad para los cristianos es una llamada a renacer y una invitación a reavivar la alegría, la solidaridad, la fraternidad y la confianza total en este Dios que camina con nosotros.

Nos dice San Buenaventura que San Francisco de Asís llamaba a la Navidad la “fiesta de las fiestas en la que Dios, hecho niño pequeñuelo, se crió a los pechos de madre humana”. La celebraba con preferencia a las demás solemnidades.

Felices los que, en medio del bullicio y aturdimiento de estas fiestas, sepan acoger con corazón creyente y agradecido el regalo de un Dios Niño.

Benjamín Echeverría, capuchino

jueves, 15 de diciembre de 2016

SER PUENTE ENTRE CREYENTES

Un sacerdote y un imán protagonizan uno de los anuncios para esta Navidad 2016 más emotivos que han salido a la luz hasta la fecha. Amazon es quien está detrás del spot que más ha emocionado en redes sociales desde su estreno y muchas han sido las opiniones que lo consideran "necesario", en estos tiempos revueltos.

El spot comienza con la visita de un imán a un viejo amigo (un sacerdote) para tomar una taza de té y charlar, entre otras cosas, sobre los achaques de la edad. Tras la velada, tanto a uno como al otro se les ocurre obsequiar a su amigo con un detalle. Unas rodilleras.

El anuncio, emotivo sin lugar a dudas, sorprende aún más por la historia que hay detrás de sus protagonistas. El Reverendo Gary Bradley y el Imán Zubeir Hassam son líderes religiosos reales en el Reino Unido.

"Esto es lo que yo hago en mi comunidad. No interpreté ningún papel. Fui yo mismo", contó a The Telegraph Hassam, quien juega un papel activo en la creación de vínculos más estrechos entre las comunidades de fe de Leicestershire. "Creo que el mensaje es muy bueno: personas de diferentes orígenes pueden compartir regalos y pueden charlar unos con otros (...). Con toda la mala publicidad que hemos conseguido este es un anuncio muy, muy positivo que muestra que las personas de diferentes religiones pueden unirse".

La Iglesia de Inglaterra dijo que también había estado dispuesta a cooperar de la misma manera. "Fomentar el diálogo interreligioso y la cohesión de la comunidad es una parte diaria de nuestra trabajo", dijo un portavoz.

martes, 13 de diciembre de 2016

BIENAVENTURANZAS DE ADVIENTO

Felices quienes siguen confiando, a pesar de que hay mil razones para desconfiar.
Felices los que con su vida y trabajo allanan los caminos torcidos y buscan la paz y facilitan hacer las paces.
Felices los que trabajan por hacer de esta tierra una convivencia que sea «un cielo».
Felices los que perforan el silencio y saben escuchar los gemidos de los hombres y las mujeres de hoy.
Felices los que acallan y callan y en el silencio encuentran la Palabra de Dios en las palabras y situaciones que la gente vive.
Felices los que en la escucha encuentran la palabra que es profecía, denuncia, grito de los que no tienen palabra.
Felices los que no solo rellenan los baches sino que roturan y trazan caminos nuevos para que transiten los descaminados.
Felices los que en el frío dan calor; los que en la noche ponen luz; los que en la soledad son compañía; los que salen de su ensimismamiento y acampan, como Dios, aliado de los heridos, malheridos y marginados.
Felices los que sueñan, como nuestro Dios sueña, un mundo mejor.
Felices los que han encontrado a Dios y se convierten en camino para que otros vayan a Dios.
Felices los que viven guardando lo que no entienden y esperan en Dios para entenderlo todo.
Felices los que no se desaniman porque saben que la tierra está habitada por Dios y su fuerza es más fuerte que el mal.
Juan Jáuregui

jueves, 8 de diciembre de 2016

¿SABIAS MARÍA...?

El grupo vocal Pentatonix está formado por cinco amigos que cantan a capela, sin acompañamiento de instrumentos de música. El tema fue compuesto en 1984 por Mark Lowry (letra) y Buddy Greene (música), a petición de su pastor local para una fiesta navideña en su parroquia. La canción le hace preguntas a la Virgen María y resalta el papel salvador y liberador de Jesús.



María, ¿sabías que tu bebé caminaría un día sobre el agua?
María, ¿sabías que tu bebé salvaría a nuestros hijos e hijas?
¿Sabías que tu bebé vino para hacerte nueva?
Que ese niño que tú diste a luz, pronto te traería a la Luz
María, ¿sabías que tu bebé dará la vista a un hombre ciego?
María, ¿sabías que tu bebé calmará una tormenta con su mano?
¿Sabías que tu bebé ha caminado por donde los ángeles pisaron?
Que cuando besabas a tu pequeño niño besabas el rostro de Dios.
¿María, sabías? ¿María, sabías?
Los ciegos verán, los sordos oirán
Los muertos volverán a vivir
Los paralíticos saltarán,
Los mudos hablarán las alabanzas del Cordero.
María, ¿sabías que tu bebé es el Señor de toda la creación?
María, ¿sabías que tu bebé gobernará un día las naciones?
¿Sabías que tu bebé es el Cordero Perfecto del cielo?
Que el Niño dormido que sostienes es el gran Yo soy.

martes, 6 de diciembre de 2016

LA VIDA SE ABRE CAMINO

Cuántas veces la queja ha aparecido en mi mente -no en mis labios que soy muy discreto- cuando semana tras semana la casa se llena de polvo y me sugiere que pase la mopa. Cuántas veces he pensado, dando un paseo, que es una lata que haya que recoger otoño tras otoño las hojas de las calles, con lo cómodo que sería que las aceras estuvieran inmutables eternamente. Igualmente cómodo y económico sería si no hubiera que hacer mantenimiento de carreteras que se van llenando de vegetación, ni quitar las hierbas que van estropeando las baldosas de tantos paseos urbanos.

En alguna travesía por montañas llenas de rocas, he caído en la cuenta que el polvo que se va acumulando entre la infinitas piedras graníticas acaba siendo el lecho de una hermosa flor. Este hecho me revela que todas estas molestias cotidianas que he descrito antes, encierran en el fondo un dinamismo que mueve el mundo: es la vida que se abre camino. Es lo que aparece en esta escena de Parque Jurásico tan llena de sentido. Es algo así como que todo lo que existe encierra en su fondo más íntimo una búsqueda de mayor vida; es como que cada criatura animada e inanimada estuviera lanzada por Dios a una existencia cada vez más intensa; como que nuestro destino es vivir: "Yo he venido para que tengáis vida y vida en abundancia" (Jn 10, 10). Si estamos rodeados de vida que busca vivir, si en la entraña de nuestra existencia la luz de la vida quiere llenarlo todo, sólo nos queda dejarnos empapar por ella. Abrirnos a esta dinámica imparable, no ponerle trabas ni frenos. Dejarnos sostener confiadamente por la vida que se abre camino.
Javi Morala

jueves, 1 de diciembre de 2016

EL INFINITO EN LA PALMA DE TU MANO

Avanzan los años en este siglo XXI y da la impresión de que la rueda del tiempo lo va engullendo todo y de que las viejas certezas que nos han sostenido durante años ya no están ahí. Pero seguimos vivos en las rutinas de siempre, como sin alma, como sin mística.

Sábato decía: “No podemos olvidar que en estos viejos tiempos, ya gastados en sus valores, hay quienes en nada creen, pero también hay multitudes de seres humanos que trabajan y siguen en la espera, como centinelas”. Quizá no seamos tantos como “multitudes”, pero hay quienes nos interesa mirar, tratar de entender, preguntarnos por el sentido, por el camino que vamos andando.

Es la pregunta por la mística. Llevada al terreno de lo normal, la mística es lo que bulle debajo de la piel, los anhelos que aún laten, los porqué por los que nos movemos, lo que aún nos interesa, lo que nos hace emocionarnos, lo que nos estremece cuando lo vemos en otros, los ideales que se transforman pero se mantienen. La mística es algo que no se puede atrapar, pero totalmente necesario. Y creemos que se puede activar, que se puede de alguna manera cultivar.

Hay para quien la mística se ha reducido al sinsentido de ir viendo y rellenando huecos de tiempos de la mejor forma posible. Otros se han anclado en lo que les dio sentido en otra época. Otros lo buscan en el codo a codo de las manifestaciones multitudinarias sociales o religiosas. Hay quienes encuentran una salida en la sectarización social o religiosa. Pero de algún modo hay una búsqueda.

Creemos que Adviento, tiempo de anhelos, puede ser un buen espacio para reactivar la búsqueda de una mística que dimane de la vieja fuente de la Palabra mezclada a la fuente nueva del momento actual. Necesitamos esa mística para que el gris sobre gris no se adueñe de nuestros caminos, para que siga brillando un sol luminoso en nuestro horizonte, para que no nos roa el desaliento. Sentir esa necesidad es el primer paso. Ojalá este tiempo de Adviento de 2016 pueda ayudarnos algo en cosas como esta que, como el viento, “no sabes bien de dónde viene ni a dónde va”, según el dicho joánico (Jn 3,8).
Fidel Aizpurúa


martes, 29 de noviembre de 2016

SER FELIZ

A toda aquella persona que le preguntemos qué quiere en la vida, y también a cada uno de nosotros, seguramente dirá que ser feliz. Otra cosa muy diferente será qué entendemos por ser feliz cada uno de nosotros. Para unos será que se cumplan sus deseos, para otros no tener dolor, para otros no tener problemas y seguramente para otros será, además, que desaparezca la injusticia en el mundo, las guerras, el hambre...

Pero la realidad de la vida no suele ser así, está llena de complicaciones. Casi nunca se cumplen los deseos, los problemas persisten, estamos llenos de miedos, inseguridades... y tampoco desaparecen las injusticias, ni el hambre, ni las guerras y, ante todo eso, ¿tenemos que caer en la infelicidad?

Quizá en este momento de la vida nos toque mirar atrás e ir descubriendo que, a pesar de todas las dificultades de la vida, las cosas no han ido tan mal. Nos encontramos con personas que nos quieren, hemos descubierto el amor y el perdón; vamos aprendiendo a dar valor a una sonrisa, a un abrazo que nos saca de la tristeza; hemos aprendido a asumir los fracasos y a verlos como camino de madurez. ¿No será algo de esto la felicidad?

No han desaparecido las guerras pero nos encontramos con personas capaces de construir la paz, no ha desaparecido el hambre pero hay personas solidarias capaces de compartir con los pobres lo que tienen, no ha desaparecido la injusticia pero hay personas que luchan y trabajan incansablemente para que la justicia se vaya imponiendo cada día. ¿No será algo de esto la felicidad?

Cuando nos abrimos a los demás, cuando nos abrimos a Dios y nos sentimos en paz y en plenitud con nosotros mismos y con el mundo. ¿No será eso la felicidad?

Carta de Asís, noviembre 2016 

jueves, 24 de noviembre de 2016

UNO+UNO (SER PUENTE PARA ALGUIEN)

José, un joven con ceguera, estudiante de optometría y participante en competiciones deportivas como el triatlón, ha de enfocar su vida desde una nueva perspectiva. En el corto aparece a su lado uno de sus amigos, Fran, su apoyo, su guía, su entrenador, para poder seguir con sus aficiones deportivas.


martes, 22 de noviembre de 2016

¿SER O... NO SER?

Desde pequeña he oído como había que tener mucho cuidado con lo que creemos ser. La humildad, sencillez, el creerse poca cosa… han sido siempre cualidades de las “personas buenas”. ¿Buenas, malas?… mal empezamos.

Mis estudios de psicología y sobe todo mi propia vida me ha ido enseñando, y ahora lo compruebo en mucha gente, el gran peligro que esto supone. Por sí mismas, cualidades deseables y valiosas, pero como en otras muchas cosas, ojito en el recipiente en el que caen. Eso de siempre tú antes que yo, el bien ajeno antes que el propio, hay que hacerle la raíz cuadrada y en todo caso, partir de una psicología sana y no la de la persona casi enfermiza que tiene una autoestima por los suelos.

Está claro que la imagen de la parábola del evangelio del fariseo y el publicano es eso, una imagen: “Gracias Señor, porque no soy como ese…” No, hombre no, hasta ahí podíamos llegar, pero tampoco la imagen sumisa y poco cosa del otro extremo.

De ahí que últimamente tengo cuidado hasta con las canciones que les quiero enseñar a mis alumnos. Esas del estilo “Yo no soy nada…” , han quedado desterradas de la lista.

Urge hoy para todos una visión de la vida y sobe todo de uno mismo, valiosa, positiva, agradecida, que no me ponga por encima de los demás, pero jamás me ponga por debajo. Cuando me reconozco valioso, libre, con capacidad, único, irrepetible y pienso en mí, y vivo por mí, todo lo demás surge por añadidura. La negación de uno mismo tiene más de peligroso que de psicología y espiritualidad sana.

Creo que el gran carisma y la gran fuerza de Jesús, surgían de un autoconocimiento y autoaprecio dignos de quitarse el sombrero. Solo desde ahí pudo salir de sí mismo y ser uno con los otros. Lo contrario, pura mediocridad y entes vacíos. Y de ellos, líbrame Señor.
Clara Lopez Rubio

jueves, 17 de noviembre de 2016

PUENTE O MURO

Con el mismo material que construyes un muro puedes construir un puente. La diferencia está en cómo lo construyas. Puedes utilizar una situación que te cause sufrimiento para aislarte del mundo o para entenderlo mejor. Piensa en lo que ganas y en lo que pierdes construyendo un muro o un puente entre las personas que te rodean y tú. Los ladrillos utilizados serán los mismos, o sea, las situaciones serán las mismas, pero eres tú el que decide que vas a construir con ellas.

Los muros crean límites, los puentes permiten traspasar barreras.

martes, 15 de noviembre de 2016

SALUDAR CON PALABRAS DE PAZ

“En toda predicación que hacía, antes de proponer la palabra de Dios a los presentes,
les deseaba la paz, diciéndoles: ‘El Señor os dé la paz’.
Anunciaba devotísimamente y siempre esta paz a hombres y mujeres,
a los que encontraba y a quienes le buscaban.
Debido a ello, muchos que rechazaban la paz y la salvación,
con la ayuda de Dios abrazaron la paz de todo corazón y se convirtieron
en hijos de la paz y en émulos de la salvación eterna”.

(Primera Vida de Celano 223)

La vida, en tiempos de Francisco, (como en cualquier época de la historia), también era turbulenta. La violencia hacía parte de la vida cotidiana: entre unas ciudades y otras, entre el papa y el emperador, entre los nobles y los burgueses, en el interior de la Iglesia de cara a algunos grupos heréticos, de cara al Islam con una cruzada y otra… La peor parte para la gente de a pie, que no ganaba nada con estas guerras y acarreaba sus consecuencias.

Francisco participó en la guerra de Asís contra Peruggia y sufrió sus consecuencias, un año de cárcel. No fue de reportero, fue a matar y a vencer y a buscar su gloria. La derrota, la cárcel, la enfermedad consiguiente, parece que empezaron a abrirle a otras búsquedas. En el fondo, toda la experiencia personal y fraterna de Francisco se puede resumir como una nueva experiencia de paz y reconciliación con todo, en un momento u otro. Y eso será lo que él ofrezca a los demás. No es casual que en su Testamento hable de esto como de una auténtica revelación y misión: “El Señor me reveló que dijésemos este saludo: ‘el Señor te dé la paz’ “ (Testamento de Francisco, 23).

En él, pronunciar un saludo así no es una fórmula, es una declaración de intenciones: decir en dos palabras quién es y a lo que quiere colaborar. En Francisco esta paz siempre será resumen de los bienes del Reinado de Dios: un corazón y una humanidad nueva, en la igualdad y reconciliación. En este sentido, él quiso ser un pacificador, quiso llevar adelante una misión de paz. En el corazón de cada persona, en las relaciones fraternas, en el modo de vivir los conflictos y de incluir a los excluidos, en las contradicciones y fracasos, en las dificultades sociales...

Francisco es alguien que se nos aparece muy capaz de llegar y "tocar" a la persona por dentro, aportando una palabra que orienta y encamina (carta a un ministro, carta a León...). Y fue alguien muy insistente de cara a exhortar en el cuidado de las relaciones humanas: “Y ningún hermano haga mal o hable mal a otro; al contrario, por caridad de espíritu, sírvanse y obedézcanse voluntariamente unos a otros” (Regla no bulada 5,11)

Y las biografías primitivas también subrayan la presencia de Francisco en distintas situaciones conflictivas ciudadanas: el desencuentro entre el obispo y el alcalde de Asís, y en Arezzo, Bologna, Gubbio... “Y les decía: ‘Que la paz que anunciáis de palabra, la tengáis, y en mayor medida, en vuestros corazones. Que ninguno se vea provocado por vosotros a ira o escándalo, sino que por vuestra mansedumbre todos sean inducidos a la paz, a la benignidad y a la concordia. Pues para esto hemos sido llamados: para curar a los heridos, para vendar a los quebrados y para corregir a los equivocados” (Tres Compañeros 58).

Quizás nos toca ser como un “hospital de campaña” en medio de un mundo muchas veces dividido por enemistades y discordias. ¡Haznos, Señor, instrumentos de tu paz; y que saludemos con palabras de Paz!
Jesús Torrecilla, capuchino

sábado, 12 de noviembre de 2016

PHILIPS EVERYDAY HERO



Esta campaña tiene como objetivo cambiar la percepción de nuestra marca entre la audiencia: no somos una compañía tecnológica y fría, sino una compañía tecnológica y humana (…). El spot está inspirado en una historia real, la historia de un limpiador de ventanas, que se viste de hombre araña para llevar un poco de alegría y entretenimiento a los niños enfermos. Él cree que animarlos les ayuda a recuperarse más rápido… Y es verdad, porque a veces la sonrisa es la mejor medicina".

Eva Barrett, responsable global de publicidad de la marca

martes, 8 de noviembre de 2016

¡QUÉ GRANDE ES LA VIDA!


Mohammed, tomando un café, me mostró este dibujo suyo, un dibujo de un poeta. Es una pluma blanca, que está encarcelada, atada al suelo y encadenada a una bola casi imposible de mover. El dibujo habla de él, que escribe directamente desde el corazón, sin pasar por la cabeza, pero que no está transitando por un buen momento: sin trabajo, con su proyecto vital estancado y sufriendo por la falta de libertad y el exceso de injusticia de su país. Pero, a pesar de todo, la pluma mantiene su elegancia, erguida, blanca en medio de la oscuridad de la prisión. Está un poco dañada en la base pero conserva la dignidad: ese es Mohammed.

Entonces me vino a la cabeza esta imagen que él mismo me mandó por WhatsApp hace ya unos meses: era Jesús de Nazaret muerto, a los pies de la cruz, derrotado... y me decía en el mensaje: "ahí está la gloria de Dios": mirar esta imagen repitiendo esa frase es sobrecogedor. Y me lo decía él, ¡que es musulmán! ¡Increíble, impresionante!


Y se lo recordé, y le dije que en su dibujo y por tanto en su vida, pasaba lo mismo: que había sufrimiento, dolor y también había algo de la gloria de Dios, había mucho de dignidad, algo de divino, algo sagrado. Mohammed asentía en silencio y entonces nos acordamos de ese relato paradójico del Evangelio: "Bienaventurados los pobres porque de ellos es el Reino de los cielos; bienaventurados los que lloran porque serán consolados; bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados...". Como que el sufrimiento no fuera la palabra definitiva... Que más allá de cómo me vaya en mis asuntos, la vida tiene otro impulso que te va llenando... Que Dios me regala otra dimensión donde estoy acompañado, sanado, salvado. Es el mismo Dios que está en el "corazón de mi corazón" como decía Mohammed. "¡¡Qué grande es Dios!!" decíamos los dos. "¡Qué grande es la vida y cuántos de sus pliegues nos quedan por saborear!" Y en esta conversación me emocionaba, por poder hablar así de Dios con alguien, por poder compartir mis búsquedas con un musulmán sufí; un diálogo que no sería capaz de tener con otros muchos cristianos...

jueves, 3 de noviembre de 2016

CÁNTICO DEL HERMANO FRANCISCO

Loado, seas, mi Señor,
por nuestro hermano Francisco,
ecologista integral,
porque amó lo creado y amó a los pobres.
Siempre se hermanaron en su corazón
estos dos amores.

Loado, seas, mi Señor,
por nuestro hermano Francisco,
místico y peregrino,
de hondas raíces,
de armonía y equilibrio interior,
pacífico y pacificado.

Loado, seas, mi Señor,
por nuestro hermano Francisco,
hondamente humano,
propagador de la dicha que Jesús promete,
incapaz de juzgar a nadie.

Loado, seas, mi Señor,
por nuestro hermano Francisco,
y por su bella mirada,
capaz de invitar con simplicidad a la alabanza
a todas las criaturas.

Loado, seas, mi Señor,
por nuestro hermano Francisco,
que nos hace todos familia,
que ha querido cuidar con amor de madre
a los seres humildes y a las personas que sufren.

Loado, seas, mi Señor,
por nuestro hermano Francisco,
que no ha tenido tratos
con el poder y el dominio,
que jamás ha explotado a nadie
que nunca se ha aprovechado de nadie.

Loado, seas, mi Señor,
por nuestro hermano Francisco,
que ha leído con gozo
el libro hermoso de la creación
y que se ha aposentado en la casa de las criaturas
como casa desde siempre.

Loados seas, por Él,
nuestro hermano y padre san Francisco,
a quien amamos.

Fidel Aizpurúa Donazar

martes, 1 de noviembre de 2016

LA CUCHARILLA

En cierta ocasión, una anciana, en su lecho de hospital, hablaba con el párroco que había ido a visitarla: “El Señor me ha dado una vida bellísima. Estoy preparada para partir”. “Lo sé”, murmuró el sacerdote. Pero, a renglón seguido, la abuelita añadió: “Hay una cosa que deseo vivamente: Cuando me entierren, quiero que me pongan una cucharilla en la mano”. El buen párroco reaccionó sorprendido: “¿Una cucharilla? ¿Para qué quiere que la entierren con una cucharilla en la mano?”. A lo que respondió con toda naturalidad la señora: “Me ha gustado siempre participar en las comidas y las cenas de fiesta en la parroquia. Cuando llegaba a mi sitio, miraba enseguida si había la cucharilla junto al plato. ¿Sabe qué quería decir? Que al final iba a haber pastel o helado”. “Y eso, ¿qué tiene que ver con este momento?”, le replicó el sacerdote no saliendo de su desconcierto. “¡Significaba que lo mejor llegaba al final! Es precisamente esto lo que quiero decir en mi funeral. Cuando pasen junto a mi ataúd se preguntarán: «¿A qué viene la cucharilla?». Quiero que Usted les responda que tengo la cucharilla porque está llegando lo mejor…”.


martes, 25 de octubre de 2016

TE COMPRENDO HERMANO/A

La fraternidad jamás es un campo de rosas. Se dan épocas de encuentro y armonía, pero también nos topamos con dificultades que, en más de una ocasión, hacen dudar de la viabilidad de la relación fraterna: diferencias ideológicas, generacionales, reacciones inesperadas, desencuentros afectivos...

Se vuelve imprescindible aclarar las relaciones, recomponerlas, reforzarlas, mimarlas. Pero junto a los medios adecuados que facilitan las relaciones fraternas, también se requiere un proceso interior personal. Hay que avanzar en esa capacidad de comprender al hermano, a la hermana, más allá del momento en que está la relación con él o ella. Es necesario hacer el esfuerzo de ponerse en el lugar de la otra persona aunque no se pliegue a mis proyectos, a mis deseos. Es esa capacidad de apreciar al otro a pesar de ver sus miserias; valorarla por encima de sus logros. Es esa capacidad de situarse en la piel de la otra persona: ¿Qué sentiría, qué pensaría, qué haría yo si mi historia, mi carácter, mis fuerzas, mis condicionamientos fueran los suyos?

Lo que se conseguiría es que la hermana no se sintiera con la necesidad de defenderse ante mí, ante mis acusaciones, ante mis denuncias. Y ello, porque tampoco tengo necesidad de acusarla, denunciarla. Esto no quita que haya hechos objetivos que quizá fuera necesario cambiar, hablar, decir. Pero la persona está salvada.

Poco a poco, iremos siendo capaces de amar al hermano no desde mí, sino desde aquél que siempre ha tenido misericordia de mí, se llega a amarla desde la gracia de Dios. Sólo entonces podremos decir en verdad: hermano, hermana, te comprendo en lo más íntimo de ti mismo.
Carta de Asís, octubre 2016 

sábado, 22 de octubre de 2016

PERDIDOS EN UN MUNDO TECNOLÓGICO

El vídeoclip de la cancion "Are you lost in the world like me?" es una excelente crítica contra la dependencia tecnológica que sufrimos, especialmente del telefono móvil. Las imágenes del videoclip nos hablan de falta de empatía hacia los demas, de vivir en la mentira, de ser insensible ante el sufrimiento de los demás, de soledad e incomunicacion, de pisar al más débil, etc... y como esta situación puede llevarnos a la destrucción y el sinsentido.

Está realizado por el ilustrador Steve Cutts que utiliza un lenguaje visual que recuerda las animaciones clásicas estadounidenses de las décadas de los años 30. El tema es de Richard Melville Hall, conocido artísticamente como Moby y está publicado en su último álbum "These Systems Are Failing"bajo el nombre de Moby & The Void Pacific Choir.

Muy recomendado para verlo y trabajarlo en nuestros grupos.

MI CORAZÓN DE PATATA

Mi corazón de patata
late al ritmo de la Tierra
y sufre dolorido
al ver cómo sangran
tantos seres y tantas almas.
Desde lo bajo de las playas
a lo alto de las sierras
los lamentos silenciosos
recorren el planeta.
Silenciosos para los mass media
y la sociedad materializada
alejada de un Dios
que sufre, ama y habla,
pero sólo
en el lenguaje de las patatas.
Hoy más que nunca
mi corazón quiere ser patata,
de esas que cuidan y aman,
llena de carne y de alma,
aunque su piel por fuera
parezca sucia, fea y arrugada.
César Yubero


martes, 18 de octubre de 2016

VENDER VIDA POR LA COMODIDAD

Cada verano me escapo una semana de travesía por los Pirineos. Este año hemos estado alrededor del valle de Luchon (Francia). Al volver a casa me venía una sensación primera de alivio: "¡qué bien, una ducha tranquilita, el sillón, los juegos olímpicos y una cama como Dios manda!". Tampoco es que vayamos de supervivencia, sino que tenemos asegurados en los refugios de montaña una ducha, unos aseos, cena y desayuno. Sí es verdad que a veces te toca dormir en una habitación nueve con ronquidos, mucho calor y poco sitio; otras veces estamos a merced del tiempo atmosférico: calor, frío, lluvia o viento; o baqueteados por lo que el camino nos exige: fuertes pendientes, pasos delicados, neveros, zonas de rocas, pendientes prolongadas. En contacto con la naturaleza, viviendo en la carencia y sin comodidades, cada pequeño detalle es un lujo que disfrutas intensamente, que vives en plenitud: un riachuelo para refrescarte en medio del calor; la sombra de una roca; una pieza de fruta en plena subida a un collado; una rebanada de tomate para hacer del bocadillo un manjar; un hilo de agua potable; una ducha caliente; que alguien haya preparado la cena para ti, etc.

Pero inmediatamente después de esa primera sensación de alivio por retomar las comodidades que he comentado me venía la pregunta: "¿a costa de qué tengo este alivio en mi vida cotidiana? ¿qué precio tengo que pagar por esas comodidades?" Y la respuesta me vino de forma clara: "el precio es Vivir plenamente". Me daba la impresión que estaba intercambiando Vida por comodidad. Que estaba malvendiendo la vida a raudales que se me da cada día, y que en Pirineos me encuentro de forma tan sencilla, por un poco de bienestar. Que los pequeños placeres que voy buscando instintivamente me separan muchas veces de la vida en estado puro, de la vida que se me regala en cada instante y que soy incapaz de absorber pendiente de las pequeñas comodidades y entretenimientos que engañan mi percepción ("la vida es eso que pasa mientras hago otros planes" que cantaba Macaco). Me estoy acordando de una historia de Diógenes que tiene mucho que ver:

Estaba el filósofo Diógenes cenando lentejas cuando le vio el filósofo Aristipo, que vivía confortablemente a base de adular al rey. Y le dijo Aristipo: "Si aprendieras a ser sumiso al rey, no tendrías que comer esa basura de lentejas". A lo que replicó Diógenes: "Si hubieras tú aprendido a comer lentejas, no tendrías que adular al rey".

Creo que tengo que aprender a vivir sin tantos entretenimientos, no sólo por solidaridad, porque muchos otros no pueden, sino por ejercitar mi capacidad de acoger la vida en estado puro, tal como se me presenta, sin acomodaciones ni sustitutivos que la descafeínan tanto.

Javi Morala, capuchino


sábado, 15 de octubre de 2016

SER PUENTE EN LA DIFICULTAD



Cuando estés abatido y te sientas insignificante,
cuando haya lágrimas en tus ojos, yo las secaré todas. Estoy a tu lado.
Cuando los tiempos sean difíciles y amigos simplemente no encuentres,
como un puente sobre aguas turbulentas yo me desplegaré.
Cuando te sientas decaído y extraño, cuando te veas perdido,
cuando la noche caiga sin piedad, yo te consolaré, yo estaré a tu lado.
Cuando llegue la oscuridad y el dolor te envuelva,
como un puente sobre aguas turbulentas, yo me desplegaré.
Navega chica plateada, navega. Tu tiempo empieza a resplandecer.
Todos tus sueños están en camino. Mira cómo brillan.
Si necesitas un amigo, yo navego tras de ti.
Como un puente sobre aguas turbulentas, voy a aliviar tu mente.

martes, 11 de octubre de 2016

REFLEXIONES DE LA VERDADERA ALEGRÍA

El texto de la Verdadera Alegría es un texto biográfico. Es un texto que surge después de la segunda crisis de san Francisco, tras el capítulo de la Esteras, y es un texto magistral de nuestro maestro espiritual, pues nos enseña a vivir. Se resume en que en el éxito, en el reconocimiento, en el aplauso no está la felicidad, esa felicidad profunda y existencial.

En este texto, Francisco parte de un supuesto caminar de ambos hermanos, donde el lugar inicial, intencionadamente, es Perusa. Allí fue donde estuvo prisionero Francisco, y ambos están dirigiéndose hasta santa María de los Ángeles, que era el lugar más amado por Francisco, el lugar del latido del corazón franciscano. Están pues en un camino de salvación. No obstante van de noche (connotaciones de oscuridad, falta de claridad), con frío (falta de abrigo y calor), cansados y ateridos, como podemos estar cualquiera en una situación de desánimo o depresión. Están en camino, tal y como Francisco percibe que tiene que ser el modelo del Evangelio: un seguimiento a Cristo sin lugar fijo ni morada, en continua itinerancia, sin seguridades excepto en Dios.

Al llegar a un convento de hermanos, llaman a la puerta, pero no les conocen. Y tiene lugar una triple negación (como Pedro a Cristo en la Pasión). Es una triple negación de la identidad de Francisco: no es querido o no se siente querido (la primera); no se siente necesario ni útil (la segunda); no es reconocido ni acogido como hermano ni ser humano (la tercera). Y este seguramente fue el sentir de San Francisco al pedírsele la redacción de una regla, y una vez redactada, ser rechazada por sus hermanos. Un sentimiento de incompresión. Como la sensación que debió tener Jesucristo (y que seguro que aún tiene con muchos cristianos) en el momento de la Pasión, de que sus discípulos no habían entendido de verdad su mensaje.

Y en esa clave está el mensaje final del texto: si en esas circunstancias tan adversas no desistes de tu proyecto, y sigues creyendo en la fidelidad al Evangelio, es ahí donde está la Verdadera Alegría. Seguir creyendo sin dudas en ese proyecto de relaciones iguales, horizontales entre las personas, en las que no hay apropiación física, material ni afectiva entre las personas. Relaciones humanas en las que no hay jerarquías ni nadie quiere ponerse por encima de nadie. En todo caso, por debajo para servir a los demás. 

Ahí está el texto: fecundo, profundo. Leedlo, hermanos, meditadlo, y reflexionemos comparando con nuestra propia vida, y aceptemos el camino de humildad que nos propone Francisco, pues nos llevará a Dios.
Cesar Yubero, ofs


sábado, 8 de octubre de 2016

SER PUENTE

La vida de hoy nos dice que es mucho más fácil fijar la atención en lo que nos divide, en lo que nos separa. Pretenden hacernos creer que encerrarnos es la mejor manera para protegernos de lo que nos hace mal. Hoy los adultos -nosotros, los adultos- necesitamos de vosotros, que nos enseñéis -como vosotros hacéis hoy- a convivir en la diversidad, en el diálogo, en compartir la multiculturalidad, no como una amenaza, sino como una oportunidad. Y vosotros sois una oportunidad para el futuro. Tened valentía para enseñarnos, tened la valentía de enseñarnos que es más fácil construir puentes que levantar muros. Necesitamos aprender esto. Y todos juntos pidamos que nos exijáis transitar por los caminos de la fraternidad. Que seáis vosotros nuestros acusadores cuando nosotros elegimos la vía de los muros, la vía de la enemistad, la vía de la guerra. Construir puentes: ¿Sabéis cuál es el primer puente que se ha de construir? Un puente que podemos realizarlo aquí y ahora: estrecharnos la mano, darnos la mano. Ánimo, hacedlo ahora. Construid este puente humano, daos la mano, todos: es el puente primordial, es el puente humano, es el primero, es el modelo. Siempre existe el riesgo -lo he dicho el otro día- de quedarse con la mano tendida, pero en la vida hay que arriesgar; quien no arriesga no triunfa. Con este puente, vayamos adelante. Levantad aquí este puente primordial: daos la mano. Gracias. Es el gran puente fraterno, y ojalá aprendan a hacerlo los grandes de este mundo... pero no para la fotografía -cuando se dan la mano y piensan en otra cosa-, sino para seguir construyendo puentes más y más grandes. Que éste puente humano sea semilla de tantos otros; será una huella.
Papa Francisco
JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2016
VIGILIA DE ORACIÓN CON LOS JÓVENES

jueves, 6 de octubre de 2016

martes, 4 de octubre de 2016

FIESTA DE SAN FRANCISCO DE ASÍS

Francesco

Relajado.
No jerárquico, ajeno
a las categorías.
Simple, indocto, desnudo
sobre la nieve. Súbito.
Homogéneo.
Primero en la pobreza, en la fiesta del frío.
Abstracto, delicado, limpio de corazón.
Dueño de una montaña diminuta.
Monócromo, concreto,
carne sobre la tierra.
Audacia y sencillez donde descansan
los intelectuales.
Enamorado, herido
cinco veces.
Solar. Aventurero.
Indistinto del cosmos.
Astronauta de humilde
escafandra. Teorema
tranquilo, de una línea.
Sorpresa de los atlas.
Nombre puro de amor
junto al océano.
Colega de los pájaros.
Lobezno.
Hermano de las cosas.
Criatura.
Poeta.

Juan Antonio González Iglesias

jueves, 29 de septiembre de 2016

CONTIGO

Vídeo con imágenes de todos los Colegios Capuchinos de España, presentando el lema de este curso escolar 2016-17. La letra, música, interpretación y grabación de la canción es obra original de los alumnos de ESO del Colegio san Buenaventura de Murcia. ¡Feliz curso escolar!

martes, 27 de septiembre de 2016

PERDONARNOS A NOSOTROS MISMOS

Casi siempre que hablamos de perdón pensamos en perdonar a los demás o que me perdonen a mí, pero... y ¿perdonarme a mí mismo?

Quizá sintamos que no hay nada de nosotros que necesite ser perdonado, o quizá que hay cosas, situaciones, que no sabemos cómo afrontarlas, ni qué hacer con ellas, decisiones que hemos podido tomar y no han sido las acertadas, reacciones que han podido hacer daño a terceros,... Podemos pensar que todas están superadas pero cada cierto tiempo aparecen de nuevo en nuestra vida.

Perdonarme supone que, al mirar atrás en mi historia, puedo permitirme no ser perfecto, puedo aceptar que no he cumplido con todos los ideales y metas que me había puesto en la vida, puedo permitirme cometer faltas y no tener que justificarme inmediatamente y que, a pesar de todo, he recorrido un camino de vida en el que asumo mi historia con todas sus luces y sombras para reconciliarme con ella y ver que ha sido para bien.

Perdonarme así me ayudará a perdonar a los demás con la libertad de ser capaz de dar la posibilidad de tener otra relación más libre y abierta. Reconocer que no soy perfecto y que, pese a ello, me quiero y me acepto como soy, me abre a relaciones donde seré capaz de aceptar los fallos de los demás de un modo fácil y comprensivo.

También podemos intentar perdonarnos desde Dios. Él perdona todas nuestras dificultades, todo nuestro pecado, incluso aquello que no podemos perdonar por nosotros mismos.

Dios misericordioso, que nos ama y nos perdona siempre, espera que nos acerquemos a Él día a día para enseñarnos el perdón a cada uno de nosotros y la mirada solidaria que haga un mundo más humano y misericordioso a nuestro alrededor.

Carta de Asís, septiembre 2016


jueves, 22 de septiembre de 2016

martes, 20 de septiembre de 2016

LA DIFERENCIA ENTRE IGUALDAD Y JUSTICIA

Mucha gente piensa que la igualdad entre personas conlleva la justicia entre ellos. Ser tratados igualmente y ser tratados justamente puede parecer que es exactamente lo mismo, pero nada más allá de la realidad.

Ya lo dijo Aristóteles en uno de sus mucho postulados. La justicia pasa por tratar de igual forma a personas que son iguales, y tratar de forma desigual a personas que son desiguales. Cuando estos preceptos no se cumplen es cuando aparecen las injusticias.

Esto quiere decir, ni más ni menos, que cada persona debe ser tratada teniendo en cuenta sus particularidades para que, a demás de ser igualitarios, seamos también justos.

La prueba más grande de esto la tenemos en las diferentes leyes que parecen “favorecer” a determinados colectivos. Mucha gente piensa que es injusto que, a determinadas personas, el Estado les subvencione el alquiler, que paguen menos impuestos, que reciban becas de estudio o que haya puestos de trabajo reservados para gente con sus condiciones.

La situación de estos colectivos, por diversas circunstancias, parte de un desventaja económica, social o física que les hace imposible competir en igualdad de condiciones. Es aquí donde se hace patente que para que haya justicia en muchos casos, no podemos, ni debemos, ser tratados de la misma forma.

Una imagen vale más que mil palabras y en este caso no podía ser más cierto. La siguiente ilustración refleja perfectamente la diferencia entre igualdad y justicia y por qué una está supeditada a la otra.
Visto en lavozdelmuro.net

jueves, 15 de septiembre de 2016

jueves, 8 de septiembre de 2016

martes, 6 de septiembre de 2016

CAMPO DE TRABAJO, GIJÓN 2016

Creo que ahora no nos queda duda alguna de aquello que dicen de que cuando das, siempre recibes mucho más a cambio.
   Porque está claro que en este campo de trabajo nos hemos dado por completo, y hemos recibido intensamente. Una semana en el maravilloso Albergue Covadonga para personas sin hogar, que ha dado para mucho.
   Nuestra rutina comenzaba muy temprano en la mañana, yendo al albergue para servir el desayuno a los usuarios o residentes del refugio. Dinámicas y charlas durante la mañana que nos ayudaban a conocer un poquito más la realidad de lo que estábamos viviendo en detalle. Servíamos la comida y por la tarde aprovechábamos para visitar Gijón. Después de servir la cena, mi momento preferido del día. La maravilla de salir al patio y poder compartir juegos y charlas con los usuarios. Pequeños ratos y conversaciones que son los que realmente han hecho mella en nosotros, y que luego estábamos ansiosos por compartir con el resto, en la furgoneta donde regresábamos a la casa de Gubbio. Y aún exhaustos tras todo el día, no nos podíamos ir a dormir sin antes contarnos nuestras vivencias del día.
   Es difícil transmitir esto tan grande que hemos vivido. Nos hemos adentrado en esa “vida paralela” que siempre está ahí presente, aunque ni la veamos, ni la queramos ver, ni nos dejen verla. Esa realidad que es tan grande y tan cercana que las cifran asustan. El día a día de esas personas, que por cientos de causas distintas han acabado en la calle, sin un lugar al que llamar hogar. Antes de adentrarnos en esta aventura algunos pensábamos que “algo habrán hecho para llegar a esa situación”. Pero la verdad nos ha dado en las narices.
   La vida de cada uno de ellos es tan distinta. Y tan compleja. Durante la semana que pasamos con ellos se empeñaron en enseñarnos de su experiencia de vida. Y por ello les doy las gracias.
   Se han abierto y se han mostrado por completo, y creo que ni he recibido ni recibiré consejos tan sabios como los suyos. Me vienen a la cabeza miles de momentos que he vivido con ellos.
   Como los que habían seguido una vida de vicios insistían en decirnos que nunca nos metiéramos en eso; cómo nos narraban, orgullosos, sus vidas pasadas; cómo se les llenaba la boca de dulzura cuando hablaban de sus hijos; cómo nos agradecían a cada momento nuestra escucha y servicio; cómo nos decían que nos iban a echar de menos porque les habíamos devuelto la alegría.
   Quizá lo que más me marcó fue cuando uno de ellos me regaló una de sus camisetas, y cuando le dije que no era necesario, me contestó: “no te preocupes, si tengo dos más”. Me golpeó muy fuerte en el corazón el que alguien que no tiene prácticamente nada, da. Da y se da. Y espero que así como eso me dio una lección tan grande, una esperanza y una ilusión, nosotros consiguiéramos también lo mismo con ellos. Que alguno de los usuarios guarde aunque sea un pequeño detalle de un momento con nosotros para que sea el empujón que necesitan. Porque yo, les deseo todo lo mejor.
   Y que no se me olvide dar las gracias a cada uno de los compañeros que hemos convivido en esta mágica semana; a las hermanas terciarias capuchinas, y en especial a Trini por la tremenda labor que hacen a diario y por habernos tratado con tanto cariño; al Albergue Covadonga, por convertirse en ese “hogar” que tanta gente necesita; y a los usuarios, por darnos tanto.
   “El verdadero viaje de descubrimiento no consiste en buscar nuevos paisajes, sino en tener nuevos ojos”.
   Aprovechemos estos nuevos ojos para VER.
Irene Ortiz

jueves, 1 de septiembre de 2016

lunes, 29 de agosto de 2016

EL BRILLO DE LO ORDINARIO

La inmensa mayoría de las cosas que vivimos las vivimos en lo cotidiano, en lo ordinario. No nos resulta fácil asumir esta realidad porque, entre otras cosas, nuestro ambiente social tiene como referencia la adolescencia, donde lo importante es lo emocionalmente intenso, y por ello, lo efímero: “¡Vive nuevas sensaciones!”. Pero hace tiempo que ya pasamos las épocas adolescentes donde vivíamos persiguiendo cualquier cosa con tal de que fuera nueva: relaciones, lugares, canciones, experiencias...

La vida concreta, la vida real, está hecha de lo de todos los días, de lo ordinario. Los días se parecen unos a otros, nos topamos siempre con las mismas caras, lo que hacemos lo hacemos mecánicamente, las primeras motivaciones hace tiempo que perdieron fuerza... Llega un momento en el cual, inesperadamente, nos descubrimos envueltos en la rutina, llevando una vida gris, funcionando automáticamente...

Una de las mayores lecciones de la vida es precisamente descubrir el brillo de lo ordinario. En un proceso misterioso, justamente, lo que nos resultaba desmotivador y dificultad para vivir, comienza a ser el modo más real de vivir, de amar lo concreto, de vivir en verdad. Lo de todos los días es la manera real de ser lo mejor que somos y tenemos. Las personas concretas, con todas sus maravillas y miserias, son las que amamos; son ellas las que nos aman y viven con nosotros. El trabajo, rutinario generalmente, es precisamente el medio en el cual me desarrollo. Mis dificultades, que no las puedo superar ya, son justamente el medio más idóneo donde puedo ejercitar mi libertad. De este modo, resulta que lo ordinario, en medio del claroscuro de las cosas y personas, es el mejor humus para desarrollar mi vida concreta.

Cuando decimos que Dios se ha encarnado, estamos queriendo decir que lo ha hecho en lo pequeño, en lo gris. Sólo así puede ser real su presencia en nuestras vidas. Sólo así brilla su luz en nuestra oscuridad, en lo ordinario.
Carta de Asís, agosto 2016


jueves, 25 de agosto de 2016

lunes, 22 de agosto de 2016

AMAR LA LUZ DE LO HUMILDE

Lo que sale a la luz, generalmente, se desvirtúa, se desenfoca. El brillo le arrebata el alma y lo que era hermoso termina siendo pasto de los focos de un plató que engulle a todo lo que entra en él.

Por eso mismo hay que tener mucho cuidado para que lo que sale a la luz permanezca en su identidad, en sus valores y pueda ser interesante, causa de luminosidad, para quien anda por la vida sin caer en el brillo cegador de una luz que nos descoloca.

¿Cómo ser luz sin que ésta se desvirtúe?. Únicamente si no se pretende el brillo personal, sino que se pretende el brillo de la compasión y de la justicia. Cuando lo que se desea es que la compasión suba de nivel y que la justicia sea considerada, se es luz y no hay peligro de autogloria, de autoafirmación, de egoísmo insensible, de caer en las garras de un yo indiferente a la situación de los demás.

La luz de los platós nada tiene que ver con la luz de vida. Aquella es ruidosa y sirve para poco; esta es callada, aunque sea luz, y se convierte en instancia luminosa para muchos que andamos en zonas de sombras.

Si la humilde luz de la compasión acompaña a nuestro modo de estar en la vida y si somos capaces, cada vez más, de aguantar la cegadora luz de la justicia, estaremos siendo instancia de luz para otros. Si lo que pretendemos es el simple brillo de mi propio ego, nuestra luz no alumbrará un metro más allá de nosotros mismos.

Fidel Aizpurúa, capuchino 

jueves, 18 de agosto de 2016

lunes, 15 de agosto de 2016

10 BENEFICIOS DE LA AMISTAD CIENTÍFICAMENTE PROBADOS

1. Ayudan a reducir el estrés.
Si estás de los nervios, llama a tu mejor amigo. Según un estudio realizado en 2011, pasar tiempo con tu mejor amigo puede aliviar el estrés y hacerte sentir mejor. No hay nada mejor que una persona dispuesta a prestarte un hombro sobre el que llorar.

2. Te hacen sentir parte de una comunidad.
Las amistades proporcionan ese sentimiento de pertenencia a un grupo. Como señala Karyn Hall, terapeuta dialéctico-conductual y autora del libro The Emotionally Sensitive Person, en un blog de la revista Psychology Today, las relaciones que se mantienen con los demás pueden tener consecuencias maravillosas en el bienestar.
"La sensación de pertenencia a una comunidad mayor aumenta los niveles de motivación, de salud y de felicidad", asegura. "Cuando observas tus relaciones con los demás, te das cuenta de que todo el mundo pasa por momentos difíciles en algún momento. No estás solo. Y saber eso resulta reconfortante".

3. Te ayudan a llevar mejor los problemas de salud.
Los problemas de salud dan miedo, pero tus mejores amigos los hacen un poco más llevaderos. Según una investigación publicada en O, la revista de Oprah Winfrey, el apoyo social puede tener un efecto positivo cuando se lucha contra una enfermedad. También reduce el riesgo de contraer enfermedades como la demencia y puede mitigar los síntomas de la depresión.
La presencia de un amigo puede suponer pequeñas mejoras para la salud. Existen estudios que sugieren que tener unas relaciones sociales sólidas reduce incluso las probabilidades de coger un resfriado.

4. Hacen que vivas más años.
Tu amigo no tiene nada que envidiar a la Fuente de la Eterna Juventud. Un estudio realizado en 2009 llegó a la conclusión de que el apoyo social puede contribuir a la longevidad. Según los autores del estudio, probablemente esto se deba a que los amigos influyen de una manera sana en los hábitos diarios.

5. Te ayudan a aceptarte.
Nadie te conoce mejor que tu mejor amigo (defectos incluidos). Pero, mientras tú tiendes a fustigarte por ellos, él te levanta el ánimo A PESAR DE ellos. Ese tipo de apoyo es crucial cuando se trata de expresar compasión y amor hacia ti mismo y hacia los demás.
"Los amigos de verdad fomentan la autoestima", explica al Huffington Post Robert Rowney, psiquiatra y director de la unidad de trastornos del humor de la Cleveland Clinic. "Y, además, ayudar a un buen amigo también puede hacer que te sientas mejor contigo mismo".

6. Son sinceros y nos permiten ser sinceros.
Tal y como se explica en la web Happify, hay estudios que demuestran que confiar en amigos íntimos es beneficioso para la salud.
"Ser sincero no siempre es fácil, pero es importante en una relación", asegura Rowney. "Pasar los tragos amargos y ser el mejor amigo posible a base de exteriorizar los pensamientos siempre es lo que mejor funciona".

7. Hacen que las dificultades parezcan menos abrumadoras.
¿Estás pasando por un momento difícil? Llama a tu mejor amigo. Un estudio realizado en 2008 llegó a la conclusión de que tener un amigo al lado puede hacernos ver que una cuesta es menos empinada de lo que es. Obviamente, esta es la comprobación física de una teoría, pero el concepto puede aplicarse también al ámbito emocional. Una dificultad es una dificultad al fin y al cabo.

8. Te hacen ver tus errores.
Nadie es perfecto, y tú tampoco. Por suerte, tu mejor amigo está ahí para recordarte amablemente lo que está bien y lo que está mal y para volverte a encaminar. Eso es señal de que es un amigo de verdad.
"Son capaces de señalar las cosas negativas que hagas, además de las positivas", explica Rowney. "Y te apoyan en ambas".

9. Hacen que tu actitud en el trabajo mejore.
Según varios estudios, tener buenos amigos en el lugar de trabajo aumenta el nivel de satisfacción laboral y hace que te impliques más en el trabajo. Es una buena razón para llevarte bien con los colegas.

10. Te hacen ser feliz.
Por ejemplo, cuando te hacen reír hasta que te duele la tripa. Una investigación demuestra que tener un amigo íntimo cerca puede mejorar el estado de ánimo de forma exponencial. Y no solo los amigos de toda la vida tienen este efecto: hacer nuevos amigos también puede mejorar el estado de ánimo al provocar que el cuerpo libere oxitocina.

Tu mejor amigo sirve para mucho más que para compartir cotilleos o darte un abrazo cuando estás de bajón. Mejoran todas las facetas de tu vida. Así que, en caso de que no lo hagas a menudo, da las gracias a tus amigos. Son únicos. 
huffingtonpost.es

sábado, 13 de agosto de 2016

¿TE DETENDRÍAS AL VER A ESTA NIÑA EN LA CALLE?

Los experimentos sociales existen por una razón bastante simple e importante: sirven para comprobar y demostrar cierta teoría o tema. Esta vez la UNICEF, en colaboración con la agencia Swith, realizó un vídeo bastante fuerte donde muestra la realidad de una niña sin hogar y al mismo tiempo, la misma niña pero “bien vestida” y cómo es que la gente reacciona ante esto. Este es el resultado.

jueves, 11 de agosto de 2016

lunes, 8 de agosto de 2016

LA CAPA DE OZONO SE ESTÁ RECUPERANDO

La capa de ozono que protege la vida del efecto de los rayos solares cancerígenos está mostrando los primeros signos de recuperación después de años de una peligrosa disminución, según un estudio de la ONU, una de las escasas buenas noticias sobre medio ambiente.

Los expertos dijeron que fue obra de una acción mundial: una prohibición en 1987 de unos gases generados por el ser humano que dañan la capa. El acuerdo ayudaría a evitar miles de casos de cáncer de piel y otros trastornos, añadieron.

El agujero en la capa de ozono que apareció sobre la Antártida también ha dejado de crecer cada año, aunque pasará una década antes de que comience a reducirse, dijo el estudio, coproducido por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.

"La acción internacional sobre la capa de ozono es una gran historia de éxito medioambiental (...) Esto nos debería alentar a mostrar el mismo nivel de urgencia y unidad para abordar el reto aún mayor del cambio climático", dijo el secretario de la OMM, Michel Jarraud.

Los estudios anteriores habían sugerido que la capa de ozono había dejado de deteriorarse. "Ahora, por primera vez en este informe decimos que vemos indicios de pequeños aumentos en el ozono total. Eso supone que ha comenzado una recuperación de la capa de ozono en términos de ozono total", dijo el científico de la OMM Geir Braathen.
 eltiempo.com

jueves, 4 de agosto de 2016

lunes, 1 de agosto de 2016

TIEMPO DE AMISTAD

La Asamblea General de Naciones Unidas designó en 2011, el 30 de julio, como el Día Internacional de la Amistad. La finalidad es que la amistad entre los pueblos, los países, las culturas y las personas pueda inspirar iniciativas de paz, a la vez que es también una oportunidad de tender puentes entre las comunidades. La resolución de Naciones Unidas pone un especial énfasis en la importancia de implicar a los jóvenes y a los futuros líderes en actividades comunitarias encaminadas a fomentar la inclusión de las distintas culturas y el respeto entre ellas, promoviendo a la vez la comprensión internacional y el respeto de la diversidad.

El tiempo de verano es el tiempo vacacional para muchas personas, es un buen mes para vivir y valorar la amistad. A lo largo de la vida, disfrutamos de la compañía de diferentes tipos de amigos. Los amigos de nuestra niñez, de la escuela, el “mejor amigo” durante la adolescencia, amigos que hacemos en el trabajo... Algunos permanecen con el paso del tiempo. Ante ellos me puedo mostrar tal como soy, sin necesidad de disimulos, dada la aceptación total y absoluta que recibimos mutuamente.

Uno de los rasgos más característicos de los buenos amigos es la capacidad de disfrutar de la presencia del otro o de los otros, de pasarlo bien juntos. En compañía de los amigos es fácil pasar un rato agradable. No importa tanto lo que se haga, cuanto el simple hecho de jugar, bromear, charlar, pasear… No hay amistad sin afecto, sin expresión de un modo u otro, de la ternura, del cariño y del interés por la otra persona.

La sabiduría popular siempre ha manifestado su convicción de que la amistad se verifica en los momentos de dificultad. Sabemos realmente que contamos con un amigo cuando confiamos en que él será capaz de dar, de arriesgar, de perder, si es el caso, algo de sí mismo a nuestro favor. Sabemos también que, solo en la misma media en que estemos dispuestos a ello seremos amigos.

La tradición bíblica nos presenta la relación de Dios con el ser humano en clave de amistad. Nuestro Dios es un Dios Amor, que no nos llama siervos sino amigos. Las lágrimas de Jesús por su amigo Lázaro tal vez sean la mejor expresión de amistad y de compasión por el amigo. Jn 11,35 es el versículo más breve de toda la Escritura; tres palabras: “Y Jesús lloró”. El más breve, pero el más significativo.

Dice un refrán: “Podrás olvidar a los que rieron contigo, pero nunca olvidarás a los que lloraron contigo”.
Benjamín Echeverría, capuchino


jueves, 28 de julio de 2016