miércoles, 29 de septiembre de 2010

CON FRANCISCO, SOMOS UNA FAMILIA (2ª parte)

Francisco no tuvo nunca planes muy claros, muy pensados. Él quería vivir el Evangelio y punto. Pero cuando, desde el comienzo, se unieron a su propósito unos amigos de Asís, intuyó que su fraternidad había de ser como una familia ampliada, con los mejores valores de la familia y los mejores de la ampliación. Sus mismos compañeros lo vieron así. En la película Francesco de Cavani dice el hno. Rufino: “Pasé de los ojos de mi caballo Omar a los de Francisco, que tuvo siempre para mí la mirada de una madre”. Sus amigos vivieron sus relaciones en modos familiares, sin el envaramiento de las órdenes religiosas de la época. Para ellos, ser hermano era simplemente eso: ser uno mismo ante el otro sin ninguna clase de ocultamiento porque se tenía la certeza de que el corazón del hermano iba a ser casa de amparo siempre abierta y dispuesta a la acogida. Pasaron auténticos vendavales y tormentas, pero esta certeza nunca les abandonó.
Vamos a poner un ejemplo de cómo entiende Francisco a su grupo: “Dondequiera que estén y se encuentren unos con otros los hermanos, condúzcanse mutuamente con familiaridad entre sí. Y exponga confiadamente el uno al otro su necesidad, porque si la madre nutre y quiere a su hijo carnal, ¿cuánto más amorosamente debe cada uno querer y nutrir a su hermano de comunidad?”. ¿Qué te parece? La cosa está clara: a los franciscanos no les gusta el protocolo, sino la familiaridad. Les encanta sentirse a gusto unos con otros sin trámites previos. Les gusta abrir la puerta del huerto cerrado del propio corazón a la visita del compañero, porque sabe que quiere hacerle bien y que nunca le va a condenar. Tienen como ideal quererse más que lo que les quiere su propia madre, que ya es decir. Esto está en la regla, en el proyecto. Ha habido y hay muchos franciscanos y franciscanas que han vivido así.
Continuará...

ACTIVIDADES PARA EL CURSO 2010-2011

Ya está disponible en la sección ACTIVIDADES el calendario de encuentros y convivencias programados para el presente curso. Si quieres más información de alguna de ella, escríbenos.

lunes, 27 de septiembre de 2010

CON FRANCISCO, SOMOS UNA FAMILIA (1ª parte)


Una familia "muy real"

Ahí los tienes: los Simpson llevan más de veinte años en pantalla. No hay serie televisiva que haya aguantado tanto. Y uno se pregunta: ¿por qué esos dibujos tan raros caen bien a señoras mayores, a niños y a gente de todo pelaje? Los “analistas” dicen que porque habla de la América real, de la vida real, de personas que piensan y viven a ras de tierra, aunque late en el fondo un indudable deseo de verdad, de humanidad, de gozo vital. Bueno, las teorías son muchas. Pero quizá se deba también a la ocurrencia de haber situado a las personas reales en el marco de una entidad real: la familia. Porque es cierto que la familia está zarandeada por muchos vientos. Pero ahí sigue, gozando de una mala salud de hierro. Algo le dice al ser humano que la familia y el camino humano andan el mismo camino. Por eso, grandes intuiciones espirituales, como la de Francisco y Clara de Asís, se han trenzado con la realidad de la familia.
¿Sabes algo de la familia de Francisco? Tenía una madre, al parecer, solícita y cuidadosa. Pero sabemos poco de ella. Dicen que se llamaba Pica, aunque este nombre saltó varios cientos de años después de la vida de Francisco. De su padre sí sabemos muchas cosas porque su proceso vocacional se efectuó en contraste con su figura. Era un rico comerciante de tejidos. No era mala persona. Tenía una visión comercial de la vida. Y en esa visión su hijo Francisco era pieza clave. Pero no encajó. Tiró por otro derrotero, no por la senda de los negocios, sino por la fraternidad. También nos ha llegado la noticia de un hermano suyo, se llamaba Ángel, que lo hería en sus opciones y le pedía un poco de sudor cuando Francisco estaba helado de frío en el monte, lejos de casa. La familia fue para Francisco una espina clavada en el corazón, pero siempre la amó. A Clara, por otros caminos le pasó algo parecido: su familia era noble venida a menos. Quedó huérfana y un tío se hizo cargo de ella. Tuvo que plantarle cara para poner en pie su difícil decisión de ser “hermano”. O sea, que, como la vida misma: familias que aman y hieren, que presionan y reconfortan. Pero tienen algo en común: para crecer, como persona y como seguidor/a de Jesús, es preciso ampliar, del modo que sea los estrechos límites de la familia biológica.
Continuará...

MATERIAL DE LA CAMPAÑA VOCACIONAL 2010-2011

Ya está disponible en la sección de RECURSOS el material preparado para la campaña vocacional de este curso, con el lema "Somos una familia".

domingo, 19 de septiembre de 2010

NUEVO BLOG DE LA PASTORAL JUVENIL DE LOS CAPUCHINOS DE ESPAÑA

Estrenamos este blog para compartir las actividades que se realizan en los distintos lugares en que vivimos y trabajamos.