Christian Bobin
jueves, 10 de agosto de 2017
PODER RESPIRAR
Sí, traspaso estos mundos constantemente; y es sin duda el motivo por el que escribo. Necesito respirar y entonces voy a donde hay aire y en el mundo no lo hay: hay dinero, hay voluntades crispadas, hay una fuerza, hay espectáculo, pero no hay aire. No puedo respirar en el mundo. Pero como todos nosotros, estoy en él y he de acudir al mundo por momentos, aunque me alejo del mismo en cuanto puedo para encontrarme con el lugar del aire, con el “gran largo” que me devuelve mis ojos, mis pensamientos y mi vida. Leo mucha poesía, es algo que amo profundamente y cuando abro un libro de poemas es como cuando se va a buscar diamantes en la tierra. Me gustan muchos poetas y a cada vez que abro un libro tengo la impresión de abrir una ventana con vistas al interior (no al exterior). Mientras leo, siento que mis manos se ponen contentas de ese contacto, porque un libro no es un objeto del mundo. Hay otro mundo muy suyo que se mezcla con este otro conocido. Y seguramente se necesitan años para aprender a discernir entre estos dos mundos, aprender a distinguir entre el alimento que nos nutre y el alimento que está muerto. Pero esto se hace constantemente; no creo que haya momentos específicos para hacer esto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario