martes, 20 de diciembre de 2011

UN REGALO DE PREGÓN


Llevamos ya tantos años de pregones de Navidad que parece que ya nada te va a sorprender. Pero es que este ha sido especial. No porque haya sido más espectacular que otros o haya tenido talleres más originales. Ha sido más bien el fondo que han ido dejando detalles que se han acumulado y que han convertido el día 18 de diciembre de 2011, en un día bonito, lleno de cariño, de sonrisas, de alegría, de buen ambiente, de abrazos, lleno de papel de regalo, de cinta de regalo y de muchísimos regalos, 72 personitas, entre todos los que estuvimos: los que llegaron antes o más tarde, los que estuvieron preparando los talleres o disfrutándolos, los que estuvieron todo el día o sólo por la tarde, o sólo la eucaristía. Todos fuísteis un gran regalo, cada uno añadiendo su peculariedad, su sabor, su huella.
Ya desde la mañana, la acogida fue alegre y movidita, y el café y el caldo, que al principio lo mirábais con recelo luego entraba sin sentir, calentando los cuerpos dormidos y fríos, pero vivos. Los preñados, los villancicos y sobre todo gente de sitios distintos, unos que nos conocíamos y otros no. De Tudela, ¡qué alegría! la reconquistada; de Zaragoza San Francisco, los de siempre y caras nuevas; de Zaragoza San Antonio, gente que no conocíamos pero otro regalo; de Valdefierro, gente nueva pero con una alegría y unas ganas que impregnaron todo lo que tocaban; de Logroño, esas sonrisas ya conocidas que nos encantan. 
Luego vino la presentacíón, con un poco de mensaje y con César "Sobera" que se hizo el orejas, e Irene que estuvo dignísima ante tanto público enfervorizado. Y los talleres: un millón de sentimientos, en aquel sótano, oasis de tranquilidad y sensaciones; un millón de amigos que hicimos persiguiendo a los viandantes con la palabra mágica "gratis"; un millón de ideas detrás de cada uno de los anuncios transformados; un millón de manos para convertir papeles que venden cosas en flores que se regalan.
La comida: que ambientazo. Terminamos y no nos íbamos porque estábamos muy bien. Aquí nos mezclamos otro poco y nos volvimos a ver todos juntos que también nos gusta. En la evaluación hablamos de cómo nos había ido la mañana y rápidamente pasamos a la preparación de la eucaristía.
Y en la eucaristía conseguimos convertir una gran Iglesia en un lugar acogedor; y como alguien dijo eran gestos sencillos llenos de grandes mensajes; palabras con mucho sentido y mucho que transmitir, porque la palabra REGALO tiene mucho que decirnos. Y terminamos a tiempo, que nunca más va a volver a ocurrir; habéis vivido algo único en la historia pasada y futura de Jufra, un acontecimiento aleatorio y nunca más visible por ojo humano.
Y nos quedó pendiente escribir en casa, en el papelito de dentro del regalo, qué es lo que para mi es un regalo en lo que voy viviendo... ¿está ya escrito? Para que siempre lo recordemos...
Y luego las despedidas, que no acababan, y muchas cosas más que me he dejado y que podéis añadir en los comentarios para así entre todos hacer esta crónica de este pregón ÚNICO. Muchas gracias por hacer que este día fuera tan especial, muchas gracias por participar de algo tan bonito, muchas gracias por dejar que compartamos un poquito de tu compañía y sobre todo de tu corazón. UN BESO MUY GRANDE.

4 comentarios:

  1. Desde luego, no te falta razón. El mejor regalo de Navidad que uno podría esperar. Millones de gracias a todos por los abrazos, los besos y el cariño. ¡¡¡El calor humano es lo mejor del mundo!!!

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  2. Bueno, bueno, eso de personitas... será porque tú no te cuentas... ¡¡¡ porque eres grande !!! entiéndelo como quieras... Pero la verdad es que a pesar del cansancio, como se dice, algo para recordar...

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  3. Muchas gracias por todo y como siempre fenomenal un abrazo a todos.

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  4. Gracias porque una vez más gracias a vosotros la gratuidad en JUFRA no es una utopia es una realidad.

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