La idea creativa parte de un encuesta reciente: una de cada tres mujeres declara no sentirse feliz. A partir de ahí, el spot apela a la capacidad que tenemos para encontrar la felicidad en las pequeñas cosas y hace que el espectador se pregunte: ¿Si viera mi vida desde fuera, me daría cuenta de lo feliz que soy? ¿Sé descubrir la felicidad en lo ordinario: en la familia, en el trabajo, en la amistad…? La conclusión es que cualquiera de nosotros puede poner en marcha el motor de la felicidad, pero primero ha de mirar hacia dentro de sí mismo y preguntarse: ¿realmente soy feliz?
Según el estudio realizado por Lancôme a principios de 2019, el concepto de felicidad en la mujer española se ha transformado. En vez de “salud, dinero y amor”, lo que ahora queremos es “micro-momentos de felicidad”. Y, sobre todo, deseamos compartir la dicha con los demás para, de esa forma, multiplicarla.
Por eso, el anuncio concluye con una bonita afirmación: La vida está hecha de micro-momentos que nos hacen felices si sabemos disfrutarlos. Instantes que transcurren mientras pasamos tiempo con los demás: cuando viajamos, cuando compartimos cosas, cuando hacemos algo por los demás...
Alfonso Méndiz
No hay comentarios:
Publicar un comentario